Puebla, Puebla. Argentina es el peor país del continente en
materia de libertad de expresión en los últimos seis meses. Así de simple, así
de grave.
La prensa independiente argentina denunció ayer ante la Sociedad
Interamericana de Prensa (SIP) "la extraordinaria gravedad" del boicot
publicitario ordenado por el Gobierno a avisadores privados, "que amenaza
la supervivencia de los diarios".
Fue el presidente de la Comisión de Libertad de Expresión de la
Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), Daniel Dessein, quien
brindó por lejos el panorama más desolador de todo el continente americano
sobre el periodismo crítico, sin considerar a Cuba, donde hay ausencia total de
libertad de expresión, y a México, donde el principal problema es el crimen
organizado.
Delante de unos 200 editores, directores de medios y periodistas
de Alaska a Tierra del Fuego, Dessein relató que desde el 7 de febrero pasado
buena parte de las mayores cadenas de supermercados y electrodomésticos suspendieron
los avisos que tenían pautados en medios de la Capital Federal y de algunas
ciudades del interior.
Dijo que directivos de esas cadenas admitieron que la decisión
derivaba de exigencias verbales del secretario de Comercio Interior, Guillermo
Moreno, y que se relacionaba con recientes disposiciones sobre congelamientos
de precios.
"Esta presión sobre los anunciantes, que tiene efecto sobre
los empresarios por temor a ser inspeccionados por los organismos tributarios o
a perder la posibilidad de importar insumos o productos, configura una variante
de la censura y una vulneración del derecho de los consumidores a conocer el
precio o las ofertas de los productos que pretenden adquirir. También
constituye uno de los perjuicios más graves que ha sufrido la prensa
independiente en su viabilidad económica", afirmó.
El informante argentino dio precisiones sobre el daño sufrido
por los principales diarios nacionales: La Nación y Perfil ya perdieron entre
un 15% y un 20% de su facturación. Clarín pasó de tener 264 páginas de avisos
de las empresas de ese sector durante enero a 61 en febrero. Importantes
avisadores de algunas provincias, como Córdoba, retiraron sus anuncios de
diarios locales. Otras empresas redujeron o cancelaron sus campañas en los
diarios porteños tras la orden de Moreno.
"Sin autonomía económica, no hay independencia editorial.
La desaparición intempestiva de esos anunciantes atenta contra el equilibrio
económico de las empresas", dijo el argentino. Lo acompañaban el director
de La Nación, Bartolomé Mitre; el director de La Voz del Interior y presidente
de ADEPA, Carlos Jornet; el gerente de Relaciones Institucionales de Clarín, Martín
Etchevers; Raúl y Ernesto Kraiselburd, de El Día, de La Plata; Alejandro Olmos,
del Grupo Crónica, y la representante de Diario de Paraná, Leonor Etchevehere,
además de este redactor.
En los próximos días, el presidente de la SIP, Jaime Mantilla,
enviará una carta a las casas matrices de las empresas que suspendieron los
avisos para manifestarles la sorpresa del organismo que agrupa a 1300
publicaciones del continente ante tal decisión. La Asociación Mundial de
Diarios (WAN), que abarca a 18.000 medios de todo el mundo, hará lo propio ante
tales compañías y ante los gobiernos de la Unión Europea donde operan tales
firmas, según adelantó aquí su gerente general, Vincent Peyregne.
La noticia del boicot publicitario concitó la rápida atención de
los medios internacionales. Anteayer la cadena CNN en español difundió un largo
informe acerca del impacto que tendrá en los medios gráficos el repentino
retiro de avisadores, en tanto que los más prestigiosos diarios norteamericanos
iniciaron consultas con periodistas argentinos para comenzar a darle difusión a
la medida.
Tan crítico como Dessein fue el titular de la Comisión de
Libertad de Expresión de la SIP, Claudio Paolillo, del semanario uruguayo
Búsqueda, quien lo precedió. "Cristina Kirchner muestra nuevas e
interminables formas para acogotar a la prensa. Los inconvenientes son muy
graves. Los medios críticos no sólo no reciben un peso de publicidad oficial,
que va en enormes cantidades a la prensa amiga, como comprobamos durante
nuestra visita en diciembre a Buenos Aires, sino que ahora son estrangulados
por el retiro de la pauta privada, inducido por el propio Gobierno",
afirmó.
Inmediatamente después,
se proyectó un video realizado por la SIP que mostraba los ataques a la puerta
de El Trece a manos de manifestantes encapuchados; el insulto del jefe de
Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, a la Cámara Civil y Comercial que falló
contra el Gobierno en el caso Clarín, y palabras de los periodistas Jorge
Lanata, Magdalena Ruiz Guiñazú, Alfredo Leuco, Pepe Eliaschev, Gustavo González
y Nelson Castro, durante la reunión pública realizada para la SIP en el
Congreso de la Nación.
En el salón del Hotel Presidente Intercontinental, repleto y en
absoluto silencio, pudieron escucharse las siguientes frases. Lanata: "Hay
un grupo de gente que está haciendo la revolución y otro grupo que está
defendiendo la democracia". Leuco: "El Gobierno no ha hecho otra cosa
que perfeccionar los mecanismos de persecución". Eliaschev: "En los
medios del Estado no hay una sola voz crítica".
El abogado constitucionalista Gregorio Badeni, invitado por la
SIP, expuso el deterioro institucional que vive el país, al apuntar que se
avanza hacia un régimen autocrático y absolutista, en el que ni siquiera se
acatan los fallos de la Corte Suprema de Justicia. "La libertad de prensa
está en peligro", alertó. El periodista de La Nación Adrián Ventura, que
lo acompañaba en el panel, advirtió que lo que el populismo busca es cambiar de
régimen y que el ataque final apunta a la Justicia. Francisco Miró Quesada, de
El Comercio, de Lima, recordó que un ambiente idéntico de temor e intimidación,
sumado al mismo boicot publicitario, se vivió en el Perú de Alberto Fujimori,
bajo la mano de Vladimiro Montesinos.
El director de El Nacional, de Caracas, Miguel Henrique Otero,
llamó la atención de los presentes: "El plan es tan sistemático como
regional. Grandes aparatos de propaganda, difamación y ahogo del periodismo
independiente, ataque a opositores y empresarios críticos, asedio a la
Justicia. Mismos procedimientos y mismos países: la Argentina, Ecuador,
Venezuela y Bolivia".
Yoani Sánchez, la mundialmente conocida bloguera cubana, que
acaba de ser autorizada por primera vez a salir de Cuba, escuchaba atentamente
a pocos metros, ya que presentaría inmediatamente después el informe sobre
Cuba, en un hecho inédito en 50 años en la SIP, pues hasta ahora lo hacían
periodistas desde el exilio.
Alguien le preguntó de viva voz, delante de todo el auditorio,
si cabía trazar un paralelismo entre la deteriorada situación argentina debido
al boicot publicitario y el larguísimo período de encierro en la isla. Con voz
suave y mirada inocente, pero bajo una expectativa propia de un premio Nobel,
se ganó la ovación: "Es una jaula que se levanta. El problema es que
cuando nos acostumbramos a vivir en esa jaula nos damos cuenta de que sólo hay
agua y alpiste".
Fernán Saguier. La Nacion.com.ar.
10/03/13