"Ser ahorita defensor de los derechos humanos es un crimen
para el Gobierno", expresó Raúl Vera, Obispo de Saltillo, durante su
charla en el Décimo Congreso por los Pueblos Indígenas que organiza la
Asociación Estudiantil por los Pueblos Indígenas del Tec de Monterrey.
Ante la pregunta de
un participante, quien pidió su opinión sobre cómo se ha intensificado la guerra
de baja intensidad en las comunidades zapatistas y sobre las comunidades de
paramilitares en Chiapas, Vera indicó que la paz nunca se ha firmado.
"Están abiertas
las cosas, dada la situación que vive el país les es muy difícil en este
momento, (el Gobierno) ya tiene bastante con los grupos armados. También saben
que han generado mucha desconfianza, saben que han generado mucha incomodidad
con todas las medidas que han venido tomando estos gobiernos
neoliberales", expresó.
"Ya no es
Chiapas nada más, es todo el país que están dejando en la miseria", indicó.
En rueda de prensa
posterior a la conferencia, realizada en el Centro Estudiantil, Vera indicó que
los defensores de derechos humanos son objeto de vigilancia, según coinciden
defensores de migrantes, como el Padre Alejandro Solalinde y Fray Tomás
González.
"Nos tratan como
criminales", dijo.
"Quisieran que
aceptáramos todo sin chistar, todo lo que en este momento se hace contra la
gente, se justifica de una manera muy cínica.
"Vivimos en un
país que en un momento dado ya las cosas están el revés, los criminales somos
los que trabajamos por la justicia", dijo.
Durante la
conferencia habló también sobre su trabajo con Samuel Ruiz, Obispo Emérito de
San Cristóbal de las Casas y defensor de los pueblos indígenas, fallecido en el
2011, así como también sobre la riqueza que estos grupos han aportado a México.
Félix Barrón. elnorte.com. Monterrey. 26/08/14
http://www.elnorte.com/aplicaciones/articulo/default.aspx?id=323788&v=4