El padre Alejandro Solalinde
Guerra, dijo en entrevista a los medios de comunicación que es un acto
hipócrita por parte de las autoridades mexicanas que pidieron abrir las
fronteras para inmigrantes sirios, pues la ternura que se siente por los niños
‘blanquitos, güeritos’, deberían sentirla por sus hermanos migrantes más
cercanos, en este caso migrantes centroamericanos.
En su visita a San Luis Potosí
como parte del Festival Multicultural de Migración “De Paso Pa’l Norte”, el
padre misionero dijo que a México le falta vergüenza al referirse al
acogimiento de refugiados sirios en el país, porque se vio la manera en cómo se
rechazó a niños y niñas no acompañados el año pasado, que se pudieron haber
acogido con el Programa Especial de Migraciones, sin embargo no lo hizo y la
respuesta para los centroamericanos fue policiaca, y ahora se enternecen para
apoyar a los sirios.
“Son un faro de luz pero
oscuridad en su casa, por qué no les duelen sus hermanos del sur que están más
cerca, que son los pobres más próximos de nosotros, son los prójimos, para
ellos policías y para los demás asilos”, aseguró Solalinde.
Siete24.mx. México, 14/09/15