Washington, Estados Unidos. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió ayer en la Casa Blanca con el líder espiritual de los tibetanos, el Dalai Lama, a pesar de las protestas previas de China respecto al encuentro.
Con el fin de mitigar el enfado del gobierno chino, Obama intentó restar algo de oficialidad al encuentro. Por ello, según medios estadounidenses, la reunión no tuvo lugar en el Despacho Oval, sino en otra estancia de la Casa Blanca. La prensa no tuvo acceso a la cita.
“China se opone firmemente a todo encuentro entre funcionarios de alto rango extranjeros y el Dalai Lama”, dijo en un comunicado el portavoz del Ministerio del Exterior, Hong Lei.
“China exige a Estados Unidos inmediatamente que anule la decisión de Obama de reunirse con el Dalai Lama”, añadió Hong, y pidió al país no hacer nada que dañe las relaciones chino-estadounidenses.
En un comunicado de la Casa Blanca difundido tras el encuentro, se informó que “el presidente reiteró su fuerte apoyo a la preservación de las tradiciones cultural, religiosa y lingüística únicas del Tíbet y del pueblo tibetano en el mundo”.
Durante el encuentro de 45 minutos, Obama también “subrayó la importancia de la protección de los derechos humanos de los tibetanos en China" .
El líder espiritual tibetano —premio Nobel de la Paz al igual que Obama— ha estado en Washington para un ritual budista de 11 días.
El Universal.com.mx. 17/7/2011
"Genuina inquietud de Obama sobre Derechos Humanos en Tibet".
Washington, Estados Unidos. El Dalai Lama dijo que el presidente Barack Obama compartió una "genuina inquietud" sobre los derechos humanos en Tibet durante una reunión entre ambos en la Casa Blanca, pese a las protestas de China.
Obama es "presidente del mayor país democrático, así que naturalmente muestra preocupación por los valores humanos básicos, los derechos humanos, la libertad religiosa", respondió el Dalai Lama, el exiliado líder espiritual de Tibet, tras el encuentro.
"En consecuencia, mostró una sincera preocupación respecto de los sufrimientos de Tíbet, como de otros pueblos", agregó.
Tras calificar la reunión como un "reencuentro espiritual", el Dalai Lama dijo sentirse cercano a Obama "en el plano humano", al tiempo que señaló que sus relaciones con los presidentes estadunidenses anteriores eran de un nivel comparable.
La Casa Blanca precisó que la reunión, cerrada a la prensa, duró unos 44 minutos. Obama recibió a su invitado en la Sala de Mapas y no en el Salón Oval, donde son recibidos los jefes de Estado.
El anuncio del encuentro provocó ira en Pekín, que había pedido al presidente estadounidense que lo anulara.
Estados Unidos debe "permanecer fiel a su compromiso de reconocer que Tíbet forma parte de China", dijo el viernes el portavoz de la cancillería china Hong Lei, y exigió a Washington que "no interfiera en los asuntos internos chinos".
Milenio.com. 16/7/2011