El relator especial
de Naciones Unidas sobre Tortura, Juan Méndez, insistió en que es correcta
su afirmación de que ese procedimiento es “generalizado” en México.
En una conferencia de
prensa tras la presentación de su informe anual esta semana ante el Consejo de
Derechos Humanos en Ginebra, Méndez respondió de esa manera al gobierno de
México que negó la generalización de la tortura.
Juan Méndez dijo que
su evaluación está basada en numerosos testimonios tanto de sobrevivientes que
fueron torturados y luego liberados, como en conversaciones aleatorias con
prisioneros, incluidos niños y niñas jóvenes, de unos 14 centros de detención
en el país, en las que casi todos indicaron haber sufrido brutalidad en el
momento de la aprehensión.
“Es muy importante
que México se dé cuenta de que tiene un grave problema con la tortura. El hecho
de que estén combatiendo el gran desafío del crimen organizado en muchos
estados debería ser una razón aún más poderosa para no caer en la tentación de
cometer excepciones a la prohibición de la tortura. En todo caso, deberían
combatir el fenómeno con un compromiso renovado con el Estado de derecho y la
prohibición de la tortura”, dijo el relator.
Méndez detalló que
los casos ocurren durante las primeras 24 a 48 horas, antes de que la persona
haya sido declarada detenida formalmente. Subrayó que se trata de
procedimientos graves como el uso de electricidad o ahogamientos simulados,
además de intimidaciones físicas y morales.
El experto también
afirmó que el término “generalizada” fue utilizado porque se pudo establecer
que es cometida por todas las fuerzas de seguridad, la marina, el ejército, la
policía federal y las oficinas de los fiscales tanto al nivel federal como
estatal.
Un.org. 11/03/15