Hasta hace
poco más de medio siglo el Ku Klux Klan gozaba de gran influencia en parte de
la sociedad estadounidense. La historia le guarda a una sola persona un lugar
muy especial en la caída de la organización. Su nombre fue Stetson Kennedy. Y
con la ayuda de Superman liberó muchos de los secretos del KKK.
Por tanto
antes de hablar del hombre de acero y de cómo el superhéroe de DC traspasó las
tiras del cómic para ayudar a destapar los secretos detrás del Ku Klux Klan,
debemos hablar del verdadero héroe de esta historia. Se llamaba Stetson Kennedy
y su vida fue todavía más grande que la del propio hijo de Krypton.
El hombre que se infiltró en el Ku Klux
Klan
Stetson Kennedy (1916-2011) fue un reconocido escritor y activista de derechos
humanos estadounidense. Estudió en la Universidad de Florida y tras acabar la
carrera se unió a una editorial donde estaba a cargo de la sección de historia,
folclore y estudios étnicos. Este fue el momento en su vida en el que comenzó a
viajar y a escribir sobre las vivencias y culturas que encontraba.
Paralelamente
a su trabajo la vida de este hombre fue la de una lucha por la igualdad. Entre
otras cosas fue parte fundamental de la abolición del impuesto al sufragio o
del cambio fundamental para que se modificaran lo que se denominaba primarias
blancas, es decir, la fórmula estadounidense que hacía que los negros no
pudieran votar.
Aún así,
será eternamente recordado por dos hechos que tuvieron lugar en los años 40. El
primero y posiblemente más importante ocurrió a comienzos de la década, momento
en el que Stetson decide infiltrarse en una organización del Ku Klux Klan, el
primero en la historia y posteriormente el primero que sacaría a la luz pública
sus “rituales”.
Pasaría un
año entero con el KKK recopilando toda la información que pudo en un trabajo de
investigación brutal que luego se transformaría en el libro I Rode With Ku Klux
Klan (posteriormente The Klan Unmasked). Tras su salida, Stetson contaba con
las claves, detalles de la organización de mandos, contraseñas o rituales con
los que creía que podría tumbar al KKK.
No fue así,
al menos no al principio. Tras el año de investigación acudió al Comité de
Actividades Antiamericanas para contar su verdad. Nadie le hizo caso e hicieron
oídos sordos en cada uno de los numerosos intentos del escritor. Uno de sus
últimos intentos por sacar a la luz el material que tenía entre manos se
recuerda con una foto. Stetson, harto de que le ignoraran, acude a Washington
para verse con un comité ataviado como un miembro del Ku Klux Klan junto a una
maleta repleta con la información. La policía le para antes de entrar y acaba
detenido ese día.
¿Qué razón había para que esos documentos
no vieran la luz?
La primera
organización del Klan data de 1865 y fue fundada por veteranos tras la Guerra
de Secesión como oposición a la denominada Reconstrucción. Se promovía la
xenofobia y la supremacía de la raza blanca y sus actos duraron hasta 1882,
momento en el que la Corte Suprema de Estados Unidos determinó que el Acta
firmado en 1871 (también conocido como Acta Ku Klux Klan) era inconstitucional.
Lo curioso es que esta declaración no fue formulada por los actos que llevaban
a cabo, fue formulada porque la Constitución no extendía el poder del congreso
a conspiraciones privadas.
En
cualquier caso esta primera “orden” no estaba bien organizada y se mantuvo en
el olvido y secretismo de unos pocos hasta cuatro décadas después. Llegaba
entonces el Segundo Klan, fundado en 1915 y apoyado en un clima de racismo con
la segregación incipiente. Mejor organizados que en sus inicios, el Segundo
Klan hizo uso de los medios masivos de comunicación donde se incluían la
realización de películas (The Birth of a Nation) exaltando y glorificando la
supremacía blanca. De hecho esta película fue la que le dio la dimensión y reconocimiento
a la propia indumentaria blanca y las cruces ardientes que tristemente hoy se
conocen. Habían creado un símbolo en el que parte de la sociedad se podía ver
reflejada.
La primera
organización del Klan data de 1865 y fue fundada por veteranos tras la Guerra
de Secesión como oposición a la denominada Reconstrucción. Se promovía la
xenofobia y la supremacía de la raza blanca y sus actos duraron hasta 1882,
momento en el que la Corte Suprema de Estados Unidos determinó que el Acta
firmado en 1871 (también conocido como Acta Ku Klux Klan) era inconstitucional.
Lo curioso es que esta declaración no fue formulada por los actos que llevaban
a cabo, fue formulada porque la Constitución no extendía el poder del congreso
a conspiraciones privadas.
En
cualquier caso esta primera “orden” no estaba bien organizada y se mantuvo en
el olvido y secretismo de unos pocos hasta cuatro décadas después. Llegaba
entonces el Segundo Klan, fundado en 1915 y apoyado en un clima de racismo con
la segregación incipiente. Mejor organizados que en sus inicios, el Segundo
Klan hizo uso de los medios masivos de comunicación donde se incluían la
realización de películas (The Birth of a Nation) exaltando y glorificando la
supremacía blanca. De hecho esta película fue la que le dio la dimensión y
reconocimiento a la propia indumentaria blanca y las cruces ardientes que
tristemente hoy se conocen. Habían creado un símbolo en el que parte de la
sociedad se podía ver reflejada.
A todo esto
hay que añadir el apoyo de forma pública del presidente Woodrow Wilson en
cuanto a la exactitud de lo que se contaba en el film. El Segundo Klan manejó
durante esta época los mecanismos de comunicación como nadie, si había un
juicio contra un hombre de raza negra se demonizaba y presionaban a los medios
para enfatizar el mal personificado.
Así, se
calcula que en la década de 1920 un 15% de la población era “afiliado” o
simpatizante del Klan. Su alcance llegó a la política a través de funcionarios
del gobierno que simpatizaban con el grupo. Estados como Tennesse, Oklahoma,
Oregón o Indiana tenían gobiernos bajo el control del Klan.
Aunque en
las décadas posteriores su influencia y miembros fue decayendo, podemos
entender cómo para una parte de la sociedad los documentos de Stetson eran
“peligrosos”. No tenía donde acudir por las vías “legales” y debía buscar un
enfoque diferente, así que nuestro hombre recurre a la única persona que podía
“ayudarle”, Superman.
Superman vs KKK
El
personaje creado por Jerry Siegel y Joe Shuster en 1933 había pasado por varias
etapas antes de la entrada de los años 40. Las primeras aventuras de Superman
comenzarían en Action Cómics 1 y desde ese momento el hombre de acero se
enfrentaría a una gran variedad de enemigos. Lo hacía no sólo a través de la viñeta,
el éxito original del superhéroe que se había convertido en todo un icono
cultural en Estados Unidos trasladó sus historias a otros medios.
Así fue
como llegó a la radio en forma de serie y bajo el título de The Adventures of
Superman. Su estreno se producía el 12 de febrero de 1940 y el programa lo
protagonizaba Bud Collyer con la voz de Superman. Hablamos de una serie que
tuvo un impacto brutal y que duró en antena hasta 1951. Más de una década en el
aire donde se confirmó como la gran sensación de los más jóvenes.
Los críos
de todo el país se juntaban a la hora de la serie para seguir las aventuras del
superhéroe en las ondas. Además, la radio ofrecía una versión más pormenorizada
que las páginas de la historia del personaje. Esta fue la época en la que se
relataba con detalle el origen del superhéroe y la que potenció su imagen como
símbolo de la verdad y justicia americano.
Quizá por
esta razón no es de extrañar que el encuentro y entrevista de Stetson con los
miembros del programa fuera un absoluto éxito. ¿Quién mejor que Superman para
exponer a la sociedad los males del KKK? Además y según contaría más tarde
Stetson, el equipo de la radio estaba algo falto de ideas e inspiración sobre
el personaje. Habían agotado numerosas vías “del mal” enfrentando a Superman
con todo tipo de enemigos, siendo el último Hitler tras acabar la Segunda
Guerra Mundial.
Stetson
había acudido al programa precisamente por esa razón. Era el año 1946 y creía
que era el momento perfecto para enlazar su historia real con la de Superman.
Si los nazis ya no son una amenaza, no había mejor forma de darle continuidad a
la vida de nuestro héroe en la radio que enfrentándose al KKK.
La idea fue
aprobada y se convirtió en un serial de 16 episodios bajo el título de Clan of
the Fiery Cross. La serie salía en el aire el 10 de junio de 1946 y se emitiría
diariamente finalizando el 25 de junio. La trama gira en torno a un equipo de
béisbol, un joven que es sustituido del mismo y cómo finalmente acaba en las
garras del KKK. Ahí aparece Superman para luchar contra la organización.
Lo de menos
era la historia, lo interesante fue la fórmula por la que el equipo de la radio
y Stetson introdujeron el material del periodista en la serie. Durante las dos
semanas de emisión se expusieron muchos de los secretos mejor guardados del KKK
incluyendo códigos y rituales. Un ejemplo: durante el año en el interior de la
organización, Stetson aprendió la manera en la que se intentaba contactar con
otro miembro de otro estado. Así, cuando un miembro del Klan se acercaba a otro
posible comenzaría la frase con “Mr Ayak?” que venía a ser una abreviatura de
“Are you a Klansman?” (¿eres del Klan?). La respuesta deseada del miembro debía
de ser “Yes, and I also Know Mr. Akai” que sería la abreviatura de “A Klansman I
am” (Soy un miembro del Klan). Este pequeño ejemplo junto al conjunto de
secretos que tenía en su poder Stetson fueron apareciendo en la serie de la
radio diariamente.
Sí, se
hacía de manera indirecta y a través de la ficción, pero apoyados en la imagen
y símbolo que se había convertido el superhéroe calaron entre la sociedad,
obviamente y sobre todo en los más jóvenes. De esta forma el KKK, quienes se
habían jactado de ser una sociedad con un aire de amenaza e inescrutable
misterio, estaban siendo despojados de toda “mística” a través de la serie del
superhéroe.
Dos semanas
después de la emisión del programa de radio, la imagen del KKK había caído en
picado y eran tratados como objeto de burla. Stetson había conseguido banalizar
todo la parafernalia y rituales y su influjo se redujo a mínimos. No quedó aquí
la obra de Stetson Kennedy. Tras el éxito del programa de radio le siguió el
mayor de los triunfos, conseguía un año más tarde, en 1947, la eliminación de
la organización como asociación nacional.
Stetson
moría hace apenas cinco años con 94 años de edad. Los últimos años de su vida
los había dedicado a la fundación que lleva su nombre, una organización sin
ánimo de lucro desde la que seguía en su lucha por defender los derechos
humanos y las justicias sociales. Supongo que hay muy pocas personas que hayan
sido capaces de conseguir tanto ellas solas. Él solo había conseguido pasar
desapercibido para adentrarse en una de las figuras del mal mas vergonzosas de
la historia reciente. Fallecía el mayor contribuyente al debilitamiento del Ku
Klux Klan.
William Stetson Kennedy |
Miguel
Jorge. Gizmodo.com. 03/13/17
s.gizmodo.com/asi-fue-como-superman-revelo-los-codigos-secretos-del-k-1763741039