Falsas sospechas: Detenciones Arbitrarias en México por
policías demuestra la manera en que la policía de todo México detiene
arbitrariamente de forma rutinaria a personas para extorsionarlas. Además, los
agentes a menudo colocan pruebas falsas en un intento de demostrar que están
haciendo algo para abordar la delincuencia, o de castigar a personas por su
activismo de derechos humanos. El informe se basa en entrevistas confidenciales
con agentes de policía y miembros del sistema de justicia.
“El sistema de justicia de México es totalmente inadecuado
para su propósito y, por tanto, está fallando masivamente a la población”, ha
manifestado Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de Amnistía
Internacional.
“La policía parece estar deteniendo a personas sin más
motivo que fingir que está actuando para hacer frente a la delincuencia. En
última instancia, con esto no se consigue nada, más que poner a todas las
personas del país en peligro de sufrir violaciones de derechos humanos tales
como tortura y otros malos tratos.”
Las detenciones arbitrarias pueden dar lugar fácilmente a
otras violaciones de derechos humanos, como la tortura, la desaparición forzada
y la ejecución extrajudicial.
En este informe Amnistía Internacional investigó la forma en
la que ocurren los arrestos llevados a cabo por los cuerpos de policía en
México, en específico, cuando las autoridades alegan que arrestaron a la
persona en flagrancia; es decir, en el momento en el que se estaba cometiendo
un delito.
La investigación de Amnistía Internacional encontró que en
México los arrestos a las personas que supuestamente estaban cometiendo un
delito al ser aprehendidas, no suelen funcionar como una respuesta auténtica
para enfrentar los delitos cometidos en el país, sino que son utilizados por
las autoridades de forma ilegal, principalmente contra aquellas personas que
enfrentan situaciones históricas de discriminación, con una preocupante
afectación a hombres jóvenes que viven en pobreza.
Amnistia.org.mx. 13/07/17