Londres, Inglaterra. La implacable campaña de las autoridades
estadounidenses para detener a Edward Snowden y bloquear sus intentos de pedir
asilo es lamentable y constituye una violación flagrante de sus derechos
humanos, ha declarado Amnistía Internacional.
“Las tentativas de Estados Unidos de presionar a
los gobiernos para bloquear los intentos de Snowden de solicitar asilo son
lamentables —ha afirmado Michael Bochenek, director de Derecho Internacional y Política
de Amnistía Internacional—. Solicitar asilo es un derecho inalienable,
consagrado en el derecho internacional, y no debe ser obstaculizado.”
La organización cree también que Snowden, que
denunció irregularidades cometidas por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA),
podría ser objeto de malos tratos de ser extraditado a Estados Unidos.
“Ningún país puede devolver a una persona a otro
país cuando exista un riesgo grave de malos tratos”, declaró Bochenek.
“Tenemos conocimiento de que otras personas que han
sido enjuiciadas por actos similares han sido recluidas en condiciones que no
sólo Amnistía Internacional, sino las propias autoridades estadounidenses,
consideraban tratos crueles, inhumanos y degradantes que vulneraban el derecho
internacional.”
Algunos altos cargos estadounidenses ya han
condenado a Snowden sin juicio, tachándolo de culpable y de traidor, lo que
suscita serios interrogantes sobre si recibirá un juicio justo. Del mismo modo,
la iniciativa de las autoridades estadounidenses de enjuiciar a Snowden en
aplicación de la Ley de Espionaje le impiden basar su defensa en el interés
público de las irregularidades reveladas, en virtud del derecho estadounidense.
“Parece que el gobierno de Estados Unidos
acusa a Snowden sobre todo por revelar acciones ilegítimas cometidas por
este gobierno y por otros; acciones que violan derechos humanos”, afirmó
Bochenek.
“Nadie debe ser acusado en aplicación de ninguna
ley por revelar información sobre violaciones de derechos humanos. Estas
revelaciones están protegidas por los derechos a la información y a la libertad
de expresión.”
Además de presentar cargos contra Snowden, las
autoridades estadounidenses le han retirado el pasaporte, lo que vulnera sus
derechos a la libertad de movimiento y a solicitar asilo en otro país.
“Snowden ha denunciado irregularidades. Ha revelado
cuestiones de enorme interés público en Estados Unidos y en todo el mundo. Y
aun así, el gobierno estadounidense, en lugar de ocuparse de estas acciones o
de asumir siquiera la responsabilidad de ellas, está más interesado en
perseguir a Edward Snowden.”
“Cualquier traslado forzoso a Estados Unidos lo
pondría en peligro de sufrir violaciones de derechos humanos y debe ser
rechazado”, concluyó Michael Bochenek.
Amnistía Internacional. 02/07/13