Convivir en paz
Cada año,
el 21 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Paz en todo el
mundo. La Asamblea General ha declarado esta fecha como el día dedicado al
fortalecimiento de los ideales de paz, tanto entre todas las naciones y todos
los pueblos como entre los miembros de cada uno de ellos.
Los Estados
miembros de las Naciones Unidas adoptaron los 17 Objetivos de Desarrollo
Sostenible en 2015 porque entendían que no sería posible construir un mundo
pacífico si no se adoptaban medidas a fin de lograr el desarrollo económico y
social de todas las personas en todas partes, y garantizar que sus derechos
estuvieran protegidos. Los Objetivos Sostenibles abarcan una amplia gama de
asuntos, entre ellos la pobreza, el hambre, la salud, la educación, el cambio
climático, la igualdad de género, el agua, el saneamiento, la energía, el medio
ambiente y la justicia social.
El Objetivo
de Desarrollo Sostenible 13 “Acción para el clima“ es un llamado a la acción
inmediata por parte de todos a fin de reducir las emisiones de gases de
invernadero, aumentar la resiliencia y mejorar la educación sobre el cambio
climático. Hay soluciones asequibles y escalables, como las energías renovables
o tecnologías limpias a disposición de los países con objeto de permitirles dar
el salto a economías más ecológicas y resilientes.
Acción climática por la paz
La campaña
de este año se centra en la importancia de combatir el cambio climático con el
fin de proteger y promover la paz en todo el mundo.
El cambio
climático ocasiona amenazas claras para la paz y la seguridad internacionales.
Los desastres naturales desplazan tres veces más personas que los conflictos,
obligando a millones de personas a abandonar sus hogares y buscar la seguridad
en otros lugares. La salinización del agua y los cultivos está poniendo en
peligro la seguridad alimentaria, y el impacto sobre la salud pública está
aumentando. Las crecientes tensiones sobre los recursos y los movimientos
masivos de personas están afectando a todos los países de todos los
continentes.
La paz sólo
puede lograrse si se toman medidas concretas para combatir el cambio climático.
En declaraciones a los jóvenes maoríes y personas de las islas del Pacífico en
Nueva Zelanda en mayo, el Secretario General de las Naciones Unidas, António
Guterres, dijo que “la naturaleza no negocia” e hizo hincapié en cuatro medidas
clave a las cuales deben dar prioridad los gobiernos con objeto de alcanzar la
neutralidad de carbono para 2050: cobrar impuestos a la contaminación, no a las
personas; dejar de subvencionar los combustibles fósiles; dejar de construir
nuevas centrales de carbón para 2020; concentrarnos en una economía verde, no
en una economía gris.
El 23 de
septiembre, las Naciones Unidas están convocando una Cumbre de Acción Climática
con planes concretos y realistas a fin de acelerar las acciones para aplicar el
Acuerdo de París. La Cumbre se centrará en lo esencial del problema –los
sectores que más emisiones crean y las áreas donde el desarrollo de la
resiliencia podría marcar la mayor diferencia–, así como ofrecer a los líderes
y socios la oportunidad de demostrar una verdadera acción climática y mostrar
su ambición.
En el
camino al Día Internacional de la Paz el 21 de septiembre, las Naciones Unidas
hacen un llamamiento a todos para que tomen medidas destinadas a hacer frente
al cambio climático. Todos los seres humanos son parte de la solución: desde
apagar las luces hasta usar el transporte público, pasando por organizar una
campaña de sensibilización en su comunidad. Comparta sus ideas y actividades
con nosotros usando #PeaceDay y #ClimateAction.
“Es posible
alcanzar nuestros objetivos, pero necesitamos decisiones, voluntad política y
políticas transformadoras que nos permitan seguir viviendo en paz con nuestro
propio clima”.
¿Cómo pueden participar los jóvenes?
Los jóvenes
están respondiendo al desafío: cerca de medio millón de jóvenes de todo el
mundo han emprendido acciones sobre el cambio climático en sus hogares,
escuelas y comunidades. Según la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre
el Cambio Climático (CMNUCC), son actores clave en la concientización, la
ejecución de programas educativos, la promoción de estilos de vida sostenibles,
la conservación de la naturaleza, el apoyo a las energías renovables, la
adopción de prácticas respetuosas con el medio ambiente y la implementación de
proyectos de adaptación y mitigación.
Este año,
la celebración de los estudiantes del Día Internacional de la Paz, que tendrá
lugar el 20 de septiembre de 2019 en la Sede de las Naciones Unidas, ofrecerá
una plataforma para que los jóvenes muestren los proyectos que han emprendido a
fin de luchar contra el cambio climático y promover la paz. La celebración de
los estudiantes se llevará a cabo inmediatamente después de la Ceremonia de la
Campana de la Paz, que comienza a las 9 a.m. con el Secretario General y se
emitirá en vivo por la web en webtv.un.org.
Antecedentes
La Asamblea
General de las Naciones Unidas estableció el Día Internacional de la Paz en
1981. Dos décadas más tarde, en 2001, la Asamblea General decidió por
unanimidad designar este Día jornada de no violencia y alto el fuego.
Las
Naciones Unidas invitan a todas las naciones y a todos los pueblos a respetar
el cese de las hostilidades durante este Día y a conmemorar por el contrario
esta fecha mediante iniciativas de educación y sensibilización pública sobre
cuestiones relacionadas con la paz.
Mensaje del Secretario General
El 21 de
septiembre de cada año, las Naciones Unidas exhortan a todas las naciones y
personas a que abandonen las armas y reafirmen su compromiso de vivir en
armonía unas con otras. Hoy, que conmemoramos que quedan 100 días para el
próximo Día Internacional de la Paz, invito a reflexionar a nivel mundial sobre
el oportuno tema de este año.
“Acción
climática por la paz” transmite un mensaje claro: que la emergencia climática
mundial supone una amenaza para la seguridad y la estabilidad. A medida que las
zonas costeras y las zonas de interior degradadas se vuelven inhabitables,
millones de personas se ven obligadas a buscar un lugar seguro y una vida mejor
en otro sitio. Dado que los fenómenos meteorológicos extremos y los desastres
son cada vez más frecuentes e importantes, se corre el riesgo de que las
controversias por unos recursos cada vez más escasos den lugar a conflictos
relacionados con el clima.
El mes
pasado visité el Pacífico Sur y fui testigo de las dificultades que
experimentan quienes afrontan en primera línea este peligro existencial. No
obstante, la amenaza no solo se cierne sobre el futuro de las islas remotas: lo
que ocurre en esos lugares es una muestra de lo que espera a toda la humanidad.
La acción climática urgente es un deber de todo el mundo.
A fin de
movilizar la ambición que necesitamos, convoco una Cumbre sobre la Acción
Climática que se celebrará el 23 de septiembre en la Sede de las Naciones
Unidas (Nueva York). He pedido a las dirigentes y los dirigentes mundiales que
aporten planes concretos y realistas para acelerar con rapidez la adopción de
medidas a fin de cumplir el Acuerdo de París y lograr un cambio fundamental
para que el futuro sea más limpio, seguro y ecológico. En esa tarea, contarán
con el respaldo de las apasionadas voces de jóvenes de todo el mundo, que
entienden que está en juego su futuro.
Esta es la
batalla de nuestra vida y una carrera contrarreloj. Podemos ganar y debemos
hacerlo. Las soluciones están en nuestras manos: gravar con impuestos la
contaminación, no a las personas; dejar de subvencionar los combustibles
fósiles; dejar de construir centrales de carbón nuevas para 2020; concentrarse
en una economía verde, no gris. Cuento con su apoyo constante mientras nos
esforzamos por crear un mundo en que podamos vivir día a día en armonía con el
medio ambiente y unas personas con otras.
António
Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas.